Miro a mi alrededor, me encuentro en la cama de mi madre, lo cual es extraño ya que yo me quede dormida en otro lado,miro a mi alrededor y noto que todo es un desastre, los cajones han sido saqueados y la mayoría se encuentra en el suelo con las cosas derrochadas por todos lados, asustada salgo de la cama y me encamino a la cocina, al entrar e esta se me hiela la sangre, en la pared donde se encuentra la alacena un mensaje escrito con tinta roja, o al menos es lo que me gustaría pensar que es, el mensaje dice “Feliz cumpleaños Amber”...

Doy un grito sin abrir los ojos, entonces lo abra alarmada temiendo lo que mis ojos podrían ver, al abrirlos doy un suspiro de alivio, si fue un sueño, una pesadilla, me encuentro en el sofá con una cobija y un traste con el recuerdo de lo que eran palomitas, miro a la tele y el DVD sigue prendido, debí quedarme dormida cuando veía una película. Son vacaciones así que me di el lujo de escoger una película de miedo anoche y las consecuencias de esta fueron las pesadillas.

Me levanto y recojo el traste de las palomitas, los llevo a la cocina miro el lugar donde se encontraba el mensaje en mi sueño, sacudo la cabeza, continuo mi camino hasta mi habitación al abrirla noto mi cama tendida, ya que no la usé anoche, pero sobre esta una caja de regalo, me acerco a esta, es pequeña y de cartón, la tomo en mis manos y cae una pequeña nota, la extiendo y la leo mientras me siento en mi cama.

Amber,

Feliz cumpleaños hija, se que nunca he podido estar contigo en estos días importantes para ti, pero nunca te ha faltado un regalo, hoy cumples la mayoría de edad, me encantaría estar contigo en estos momentos para celebrarlos juntas pero, ya sabes el trabajo no me deja, te he dejado dinero para que te compres lo que tu quieras en la pequeña cajita, espero que sea el mejor regalo que nos podríamos dar, si darnos ya que yo te doy el dinero y tu lo usas como te gustaría usarlo.

Te quiere mucho,

Mamá

sonrío al terminar de leer, dejo a un lado la carta y tomo la caja de nuevo, la abro y miro el pequeño montonsito de billetes que se encuentran dentro esperando para ser usados, lo tomo y lo cuento, $1,000 exactos

-Wow Mamá, ésta vez te has lucido- me digo a mi misma mientras tomo el dinero y lo meto en un bolso.

Al terminar de bañarme y desayunar sano ( una manzana y un cereal con leche) tomo las llaves de la casa y salgo a caminar, si se preguntan a donde iré, les contesto que tengo planeado ir al centro comercial a comprar lo que más he querído desde hace aproximadamente 5 años, si, desde los 13 años he querido una.

Suena mi teléfono, miro la pantalla antes de contestar es mamá

-hola?

-Linda!Feliz cumpleaños! Ya has visto mi regalo? Leiste la nota primero verdad?

-Si, lo he hecho así, gracias mamá

-y a donde te diriges ahora?

-Voy al centro comercial

-Dime que no vas a comprar la patineta

-Mamá! En la nota dice que puedo comprar lo que quiera! Además la quiero desde los 13!- digo en un tono “ofendido”

-Tienes razón, debí de haber especificado...Al menos llevas sueter?

-Mamá, ya tengo 18 años, y si traigo sueter por que hace un frío de mierda

-Ese vocabulario, señorita... aunque admito que tienes razón

ruedo los ojos divertida. Entonces llego al centro comercial.

-Ya llegue mamá

-Estas segura de que no quieres disfrutar tu cumpleaños con amigos?

-Mamá ya te dije que mis amigos están de vacaciones!, además a nadie le gustaría salir a patinar conmigo por el hecho de que hace frío, estamos a pleno invierno!

-Pero linda, ni siquiera sabes patinar

-Hoy aprenderé mamá, ya lo verás.

-Bueno, linda me tengo que ir, el jefe me necesita, que disfrutes sobandote el trasero por mi- ella rie al igual que yo y cuelga.

Doblo la esquina donde se encuentra la tienda de deportes extremos, aquí venden bicicletas, instrumentos de alpinismo, patines y por supuesto Patinetas, mis ojos se abren de la impresión cuando solo me encuentro 2 patinetas colgadas cuando hace 2 semanas había mas de 20.

me dirijo con el chico que trabaja aquí

-Disculpe, usted sabe donde están las patinetas?

-aquí- me señala a las 2 que quedan- solo tenemos estas 2 por ahora-una de llantas verdes y otra de llantas naranjas- por la temporada de navidad, mucha gente se las ha llevado y solo nos quedan estas

-wow, gracias- el chico me sonríe y comienza a atender a otros chicos, salgo de la tienda al recibir una llamada de mi mejor amigo Logan

-AMBER!!- me grita desde su móvil- Feliz cumpleaños!!

-Gracias Logan! Me agarras en un mal momento, ahora voy a comprar mi patineta

-De verdad?! Genial! Por fín cumplirás tu sueño- ríe- apuesto que cuando la compres te irás a aprender a andar sola, verdad?

-Supones bien

-pues te sobas por mi- ríe escandalosamente

-Dios! Pareces mi madre!

-Lo se, siempre me lo dices, bueno tengo que irme, la piscina me espera

-Sale, adiós- cuelgo y ruedo los ojos con una sonrisa, este chico es genial, pero se encuentra en Miami, mientras yo aquí en la ciudad aburrida.

Regreso a la tienda y me dirijo a la pared del fondo donde se encontraban las patinetas.

Me quedo helada al no ver ningúna en la pared

PERO si estában hace unos minutos...

me dirijo hacia la chica de la caja

-Disculpe, han comprado las últimas patinetas en estos últimos minutos?- no podia evitar que mis ojos se empezaran a llenar de lágrimas, se que es estúpido pero estuve a nada de tenerla...

la chica me sonríe y me dice:

-De hecho si, un chico vino hace unos momentos y compró ambas, pero después salió de la tienda y regresó una, dijo que cuando volviera una chica, te señaló a ti, que te la dieramos, por que escuchó tu conversación telefónica y que te la dieramos sin cobrar.

Esa información por alguna razón no cabía en mi cerebro, eso era muy raro. Quien haría eso? Y por que?

Ella me tiende la patineta con la bolsa de la tienda,la recibo sin entender por que mi cuerpo reacciona de esta manera. Entonces la miro, es la de llantas naranjas... como sabía este chico que quería la de las llantas de este color?